Catalana de nacimiento y ciudadana del mundo. Auténtica. Risueña. Llorona. Sentimental. Gracias a ella re descubrí la palabra Serendipia. Directora de hoteles en su día. En la red te emociona. Y hace que te partas de la risa con sus innumerables anécdotas. La conocí gracias a Teresa Alba.
En el día de hoy pasa por #DetrásDeLaArroba para que puedas conocer su parte más humana la única, inconfundible e inigualable (estoy en modo peloteo máxima, jajaja) Èlia Guardiola.
Entrevista a Èlia Guardiola
1. A ver Èlia, la entrevista no puede comenzar de otra manera que hablando de las anécdotas que te ocurren en redes sociales. De todas ellas, ¿con cuál te has reído más y cuál te ha hecho enfurecer?
Buff… tengo decenas, por no decir centenares. Una de las que más me hizo reír fue a raíz de una foto que publiqué después de dar una ponencia en ESADE, en Barcelona, octubre 2015. Un buen amigo, Rafa Sospedra, me hizo una foto en plena charla. El suelo era gris, y como yo no me estoy quieta nunca, pues la tarima en aquella ocasión no era suficiente, además de incómoda para movernos, con un montaje negro para una mesa de presidencia o de debate. El caso es que la puse en mis redes en agradecimeinto a los asistentes, a la organización, a la gente del streaming, vamos, lo que suelo hacer siempre en estas ocasiones.
En Google Plus, alguien, pero de forma seria y convencida, me puso un comentario como “Estimada Elia, te ves muy guapa en la vía del metro”. No pude evitar hacer captura, tapar el nombre, y publicarlo en mi perfil de Facebook con mis típicos comentarios irónico-sarcásticos para ocasiones especiales. Y ésta bien lo merecía. Creo que ha sido una de las publicaciones más comentadas en mi perfil, más de 100 comentarios entre los que había muchos memes con esa foto que hicieron algunos amigos cabr… eso, que les quiero mucho 😛 Aunque lo mejor fue el buen rato, no solo que pasé yo, sino lo más importante, el que pasaron el resto de los lectores.
La peor… bueno, déjame pensar porque he tenido varias. Verano del año pasado, en Google Plus también, aunque fue una mezcla de situación admirable de las redes y sus usuarios, e impotencia por mi parte ante tal situación.
Un proyecto a persona que robo fotos de mi perfil, creó un perfil con mi nombre, editó las fotos manipulándolas y añadiendo el símbolo de la falange, y se fue a una de mis publicaciones a provocarme. A partir de ahí todo eran provocaciones para que viera que me había suplantado la identidad. Esto ocurrió un sábado de verano, con lo cual, llamar a Google España era misión imposible. Muchos de mis contactos y no contactos en Google Plus empezaron a hacerse eco de la situación. Jose Luis Santana Blasco, amigo desde los inicios de G+ en 2011, hizo un post explicando la situación para que la gente denunciara el perfil falso. Recibí un mail de Google diciéndome que tenía razón y que pasaban a suspender el perfil suplantador. Pero… tachán!!! Sorpresa!!! El perfil que suspendió Google fue el mío en lugar del otro, y me pregunté: A ver, un perfil nuevo sin publicaciones más que 4 fotos robadas y manipuladas con el símbolo de la lafange, ante un perfil con más de 23.000 seguidores por aquél entonces, con publicaciones diarias desde 2011 y con una repercusión cada una de dos y tres cifras en masunos y compartidos… ¿¿¿Y ME SUSPENDEN MI PERFIL?!?!?!? ¿¿¿PERDONA?!?!?!!Quién lo hizo o era becario o se había tomado algo, de verdad. Hablé hasta con Google Play en Dublín, pero grata sorpresa la mía cuando les conté mi situación y me ayudaron, en lo que pudieron, pero lo hicieron. De hecho me llamaron el lunes siguiente solo para preguntarme si se había solucionado, de tanto que les impactó lo ocurrido. Hasta llamamos a Google México, que fue entonces cuando nos hicieron caso. Y hablo en plural porque fueron muchas las personas que me ayudaron, sinceramente. La magia y el poder de las redes es único, para bien y para mal 🙂
2. Sé que eres de Cataluña, que has vivido en Andalucía, y ahora lo haces en Madrid. De cada una de las tres comunidades, su clima, sus gentes… De lo que creas conveniente, tienes que darme un aspecto positivo y negativo
De Cataluña poco tengo de negativo que decir, pero es que no puedo generalizar. Hablamos de que dentro de España hay muchas culturas, pero dentro de Cataluña ocurre exactamente lo mismo. Barcelona, una ciudad cosmopólita, con decenas y decenas de etnias y globalizada donde lo que menos hay son catalanes, o catalanes que hablen catalán. En Girona, mi ciudad natal, somos (generalizo, porque en mi caso no lo soy nada) muy cerrados, por ejemplo. No sé… de verdad que tendría que entrar en temas políticos para decir algo negativo y ya sabes que en las entrevistas jamás hablo de política, fútbol o religión 😉
Cosas buenas que me quedaría de Cataluña… TODO. Estoy enamorada de mi tierra, sobre todo de Girona, y de la Costa Brava que tanto echo de menos.
De Madrid lo que menos me gusta es el hecho de que no tenga playa, aunque tampoco es que no me guste, sino que se la añadiría 😛 En realidad de Madrid no puedo decir nada malo tampoco. Llevo poco más de 3 años viviendo aquí y sinceramente, soy feliz aquí. ¿Quién no sería feliz viviendo en la Sierra Norte de Madrid donde te despiertan los pájaros cada mañana? Bueno… en verano que te despierten a las 5 de la madrugada cuando empieza a haber luz no hace ni pizca de gracia, pero se lo perdono… 😉
De Andalucía quitaría el viento sofocante de África, y a algunos les pondría un par de marchas más de velocidad a la hora de trabajar. Aunque esto es cosa mía, la hiperactividad no es muy compatible con ciertas velocidades ajenas. E insito que generalizo, porque he tenido en mis equipos de trabajo, andaluces que ya les gustaría a muchos trabajar como ellos. Me gusta su cercanía, su forma de ver la vida de muchos de ellos (de vosotros) aunque ciertas cosas no las comparta. Respeto lo llaman… Tengo muy buenos amigos andaluces, y una de mis mejores amigas es de Sevilla precisamente 😉
Supongo que me adapto con facilidad en los destinos que elijo o me ha tocado vivir.
3. ¿Existen momentos en los que preferirías solo tener animales a tu alrededor y no humanos?
¡¡CADA DÍA!! Cada día tengo algún momento, por breve que sea, donde preferiría tener solo animales a mi alrededor antes que humanos. El mundo está muy intoxicado, aunque sigo creyendo que el ser humano es el único que puede llegar a hacer de este mundo un lugar mejor. Entre otras cosas porque somos quienes nos estamos cargando el planeta y tenemos los recursos para mejorarlo.
Afortunadamente tengo a mi pequeño mamut de 4 patas, Freud, que está conmigo casi las 24 horas del día. Trabajar desde casa es lo que tiene 😉
4. Pregunta múltiple de respuesta rápida: De las siguientes cosas que te enumero, ¿cuál/es NO has hecho?
Copiar en un examen, raparte la cabeza, escaparte de casa, hacerte un tatuaje, escribir una carta de amor, hacer una trastada y echarle la culpa a otr@.
Comodín de la llamada… excepto escaparme de casa, aunque eso no significa que en algún momento no lo haya pensado, las demás todas. Un tatuaje no, dos, pero confieso que llevaría 6 o 7 más.
5. ¿A una crack del marketing emocional cómo se le emociona en lo personal?
Gracias por lo de crack, pero nunca me he considerado como tal. Solo hago lo que me gusta sintiéndolo e intentando transmitirlo a los demás tal como lo vivo y lo siento, es decir, con la mayor de mis pasiones.
A mi se me emociona con cualquier cosa. Cualquier cosa que no espere, por ínfima que sea. Soy muy floja, lloro por todo y me emociono por menos que todo.
6. ¿Cómo has reaccionado o reaccionarías en los siguientes casos?
– Alguien está hablándote o hablando para varias personas y sabes que está mintiendo: Cara de Póker y acto seguido risa cínica por lo bajini. Si tengo mucha confianza con esa persona se lo diré. Si no, allá él/ella con sus mentiras. Mi madre me enseñó que las mentiras tienen las patas muy cortas, y cuesta menos encontrar a un mentiroso que a un cojo.
– Se cae alguien cerca tuya: Voy rápido a ayudarle. Sin pensarlo. Me ha ocurrido varias veces. Ah, y no me importa la edad y si va acompañado. Voy, así de simple.
– Eres tú la que se cae: Me troncho de la risa de mi misma. También doy fe de ello.
– Ves una pelea en la calle: Depende de la gravedad. Me explico, si es una discusión entre dos que no llega a más, no me meto. Si hay insultos a una mujer, niño o persona mayor, igual sí suelto algún comentario. Estos abusos me pueden… Si es una pelea con violencia física, llamo a la policía.
– Intentan ligar con tu pareja: Depende más de la actitud de mi pareja, cuando la he tenido, que de quien intenta ligar con mi pareja. Si no le sigue el juego, me hace hasta gracia.
– Te llaman por teléfono (o a la puerta de casa) el típico comercial de seguros o telefonía a las 4 de la tarde, 10 de la noche, o un fin de semana: Fácil. Si tocan el timbre de la puerta se van corriendo. El primero que sale es Freud, mi pequeño mamut de 40 kilos, un alano español que impone. Luego todo lo que tiene de grande lo tiene de bueno, pero ya de primeras, acojona (perdón). Si me llaman, lo siento estoy trabajando si tengo prisa, sino, les dejo hablando solos con el altavoz puesto y de vez en cuando suelto un “ahá”, para que parezca que escucho.
7. Tengo una pequeña mochila con poca ropa, 50 € en el bolsillo y quiero vivir estar toda la semana fuera de casa conociendo lugares y saliendo de la monotonía. ¿Qué me aconsejarías?
Que te vengas a mi casa, hay espacio para invitados y tengo lavadora para lavar la poca ropa y así vayas limpio a diario. Con los 50 euros llenamos la nevera un poco para la semana. En la Sierra Norte de Madrid hay mucho por ver 😉
En serio Manuel, nos empeñamos en viajar fuera de España y este país tiene una riqueza medioambiental, cultural, histórica y artística que no nos la terminamos. Somos unos privilegiados, y no nos percatamos de ello hasta que un fin de semana tomamos la decisión de ir a menos de 100 kilómetros de nuestra casa y deleitamos con la escapada.
8. Cuéntanos 3 cosas que aún te falten por hacer (y, evidentemente, que no sean a nivel profesional).
Ser madre de un ser humano que haya gestado yo, y eso no ocurrirá. No al menos hasta la fecha de hoy porque tengo claro que no quiero tener hijos.
Hacer Rafting. Esto espero hacerlo. Mejor dicho, lo haré.
Ir a New York. Y esto espero que ocurra también… Así que por mi parte, en un momento u otro de lo que me queda de vida tengo la intención de mandaros una foto desde allí 😉
9. Quiero que te inventes un final alternativo para cada una de las películas que te nombro a continuación: Seven, Gladiator, La lista de Schindler, Algo pasa con Mary, Sé lo que hicísteis el último verano.
Un final común para todos no estaría mal, pero sería muy genérico y carecería de sentido, aunque alguna de ellas tampoco tiene mucho ya de por sí.
Para “Seven”, crearía un octavo pecado. Somos seres humanos, así que costaría poco crearlo.
Para “Gladiator”, los juntaría con la de 300 y/o la serie Spartacus. Puestos a ser gores… Aunque me gustaría ver la versión de Gladiator dirigida por Quentin Tarantino, jajaja…
Para “La lista de Schindler”, apufff… no puedo tocar nada de esa película, demasiada cruda realidad. Sí, claro, el final lo cambiaría y haría como que no ha ocurrido nada en toda la película, pero me parecería una falta de respeto hacia quienes lo vivieron en primera persona y quienes lo sufrieron directa e indirectamente a su alrededor.
Para “Algo pasa con Mery”, no sé, es que cambiar el final de esta película es cambiar una chorrada para añadir otra. No se puede adulterar una película de humor chorra de ninguna manera. Siempre te sobran partes, pero luego piensas “¿y por qué lo sustituirías?” La respuesta es la que te digo, “por otra chorrada”.
Para “Sé lo que hicisteis el último verano”, debo decir que no soporto las pelis de terror, ni los thrillers de suspense que rozan ese terror. Soy una cagona. Uix, perdón, ¿se puede decir cagona? Si bien he visto la película, me pasé más de la mitad viéndola con un cogín debajo los ojos para que fuera más fácil y rápido taparlos.
10. ¿Tienes alguna/s manía/s confesable/s?
AjjaJAAJAJaAJa… muchas!!! Soy una obsesiva compulsiva. No soporto los números pares. El volumen de la radio o la tele siempre los pongo en un número impar. O poner el calzado siempre paralelo. O poner las especias con el nombre del bote mirando hacia adelante todas. Hacerme crujir el dedo gordo del pie izquierdo ¿Sigo? Porque esto me puede conllevar largas conversaciones en redes, en la radio (ejem…), memes y tuits XDDD
Para finalizar, ahora tú puedes hacerme una pregunta.
Èlia Guardiola me pregunta
Si pudieras elegir ser mujer, ¿qué mujer de las más o menos conocidas te gustaría ser? Ya sea por su carisma, su inteligencia, su desparpajo, su saber estar, su locura, y exhuberancia, su excentricidad, por su trabajo, su familia… o incluso puedes juntar varias mujeres indicando con qué parte te quedarías de cada una de ellas.
Por su carisma: Lady Di.
Por su inteligencia: Marie Curie.
Por su saber estar: Reina Sofía.
Por sacar partido a su excentricidad: Madonna o Lady Gaga.
Esto por hablarte de algunas conocidas. Pero en el mundo real me quedo con las mujeres que son capaces de hacer “cualquier cosa” por sacar su familia adelante.
Gracias a Èlia Guardiola por mostrarnos esa parte menos conocida que hay tras la profesional que eres.
Manuel felicitaciones, realmente somos pocos los que tenemos la dicha y el privilegio de conocer esta faceta humana y auténtica de Èlia, y no porque ella no lo demuestre a diario sino porque hay muchos ciegos en este mundo 2.0. Gracias en nombre de una amiga que la adoro por compartir esta entrevista que literalmente me emocionó mucho.
Y a ti mi muñeca, enhorabuena porque son pocas las personas que hay en el mundo que se atreven a demostrar su lado humano ante una sociedad que se deja llevar “por el que dirán”.
Se les quiere,
Nana
Gracias de corazón Adriana. Eres de las personas que mejor me conoce, pero cierto es que no me importa mostrar mi lado humano, aunque conlleve el riesgo de que los detractores lo usen en mi contra. No importa, es parte del hecho de ser uno mismo.
Me encantó el formato de la entrevista porque la parte profesional la dejamos a un lado y desnudamos la parte humana. Creo que son necesarias más entrevistas humanas en nuestro día a día.
Gracias a ambos por ser parte de mi vida.
Èlia